En las plantas de fabricación, proporciona energía estable para líneas de producción automatizadas. Por ejemplo, en las plantas de fabricación de automóviles, las subestaciones tipo caja proporcionan energía continua a la maquinaria automática, como robots de soldadura y equipos de pintura, para garantizar procesos de producción ininterrumpidos. En el sistema automatizado de almacenamiento y logística, proporciona energía para equipos de clasificación automática, cintas transportadoras, robots de almacenamiento, etc., para garantizar un almacenamiento y transporte eficiente y preciso de las mercancías. En el centro de datos, como eslabón clave en el suministro de energía, proporciona un suministro de energía estable para servidores, sistemas de refrigeración y otros equipos, y ayuda a que el proceso automatizado de almacenamiento y procesamiento de datos se ejecute de forma segura.